
¿Qué son las Pruebas de Penetración?
Las pruebas de penetración, también conocidas como pentesting, son una técnica utilizada para identificar y explotar vulnerabilidades en los sistemas de seguridad de una empresa. Estas pruebas simulan ataques reales para evaluar la resistencia de los sistemas frente a ciberataques.
Tipos de Pruebas de Penetración
- Prueba de caja negra: Los testers no tienen información previa sobre el sistema objetivo, imitando a un hacker real.
- Prueba de caja blanca: Los testers tienen acceso total a información como diagramas de red, códigos fuente y credenciales.
- Prueba de caja gris: Los testers tienen acceso a cierta información limitada, como rangos de IP.
Metodologías Comunes de Pentesting
Existen varias metodologías que los testers pueden seguir, entre las más comunes se incluyen:
- Guías de Pruebas de Seguridad de Aplicaciones de OWASP
- Estándar de Ejecución de Pruebas de Penetración (PTES)
- NIST SP 800-115
Fases del Pentesting
1. Reconocimiento
El equipo de pruebas recopila información sobre el sistema objetivo. Dependiendo del objetivo, pueden estudiar su código fuente o analizar el tráfico de la red.
2. Descubrimiento y Desarrollo de Objetivos
Utilizando el conocimiento obtenido, los testers identifican vulnerabilidades explotables. Por ejemplo, pueden usar un escáner de puertos para buscar puertos abiertos o desarrollar un pretexto para un correo de phishing.
3. Explotación
El equipo inicia el ataque real utilizando diversas técnicas, como:
- Inyecciones SQL: Intentan que una página web o aplicación divulgue datos sensibles.
- Cross-site scripting: Plantan código malicioso en el sitio web de una empresa.
- Ataques de denegación de servicio: Inundan los recursos de la red con tráfico para dejarlos fuera de servicio.
- Ingeniería social: Utilizan tácticas para engañar a los empleados y comprometer la seguridad.
- Ataques de fuerza bruta: Intentan romper contraseñas generando y probando combinaciones hasta encontrar una que funcione.
- Ataques de intermediario: Interceptan el tráfico entre dos dispositivos para robar información o plantar malware.
4. Escalación
Tras explotar una vulnerabilidad, los testers intentan moverse por el sistema y acceder a más partes de él. Este proceso se llama "encadenamiento de vulnerabilidades". El objetivo es mantener el acceso y aumentar sus privilegios mientras evaden las medidas de seguridad.
5. Limpieza y Reporte
Al final del ataque simulado, los testers limpian cualquier rastro que hayan dejado, como troyanos o cambios en configuraciones, para que los hackers reales no puedan aprovechar sus exploits. Luego, preparan un informe detallado sobre las vulnerabilidades encontradas, los exploits usados y recomendaciones para mejorar la seguridad.